El Poder y La Intención de la
palabra, nos hace tomar consciencia de nuestras limitaciones y lograr
superarlas.
Esto se puede aplicar en nuestras
molestias o “enfermedades” físicas, que no son más, que el reflejo de lo que
estamos realizando mal o no queremos hacer; el cuerpo manifiesta y avisa a través de un dolor, que es lo que
debemos cambiar y superar, para así lograr continuar con nuestro crecimiento y
evolución.
Un ejemplo de aquello, es algo tan
común, como un dolor de cabeza, que proviene de la invalidación de uno mismo,
de una autocrítica, de los miedos o de un conjunto de todo esto.
Ahora apliquemos el Poder y la
Intención en esta frase:
Me amo y me apruebo. Con los ojos
del Amor me veo a mí mismo(a) y todo lo que hago. Estoy a salvo.
Al decirla, vamos llenándonos de
Fuerza y más importante aún, Despertando, para que poco a poco el dolor de
cabeza, se disuelva y seamos conscientes, de lo que el cuerpo nos trata de
comunicar.
Eric Díaz M.
